viernes, 26 de octubre de 2012

Pequeña


Linda niña que acaricia las teclas de un piano. Dulce niña que transforma en bella melodía cualquier tragedia que pueda suceder. ¿Dónde se encuentra tu escondite? Necesito conocer el camino que me lleve de nuevo a tu lado, que me permita contigo cruzar una mirada y volver a sonreír. Deseo ver la luz de tu mirada cuando tus ojos se cruzan con los míos y lentamente cambian de rumbo para no incomodar, deseo de nuevo ser testigo del amor más sincero, ese que desprendes sin importar si te alaban o rechazan, si te hieren o te abrazan, ese que tan solo tu sabes dar.

¿Dónde se haya tu alma inocente llena de ternura y que desconoce cualquier mal? Las ganas de encontrarte me alejan del lugar donde te escondes, de ese sitio que nadie conoce y el que parece imposible descubrir.

Las estrellas me guiarán a tu guarida de noche, el sol alumbrará allá donde te encuentres durante el día y si llueve no abandonaré mi destino porque sé que la luz que desprendes formará el más bello arco iris que me permitirá seguir el camino llegando hasta al final.

Conseguiré encontrarte y de nuevo abrazarte, me perderé de nuevo contigo impidiendo alejarme de tu vera una vez más. 

domingo, 2 de septiembre de 2012

malditos impulsos

Los impulsos que parecían haber desaparecido han vuelto a ti, siempre tan difíciles de controlar, siempre con más fuerza que tu interior.

Bloqueo, mente en blanco, tan solo un pensamiento, tu voz te guía, te conduce por el peor camino, por el que jamás deverías tomar y sin embargo el más costoso de evitar.

No eres tú, no eres capaz de conotrolarte, de pensar con claridad, de valorar, de obtener seguridad, de cambiar aquello que sucede en ese precioso instante.

Todo se derrumba cuando pasas a la acción, sin conocerte a ti misma acabas contigo, es entonces cuando un sonido, un fugaz pensamiento, una imagen hacen que vuelvas a la realidad. En ses momento caes rendida, arrepentida de haber cometido el mismo error de siempre, de no haber sido capaz de controlar...

Es momento de pedir ayuda pero no puedes pronunciar palabra alguna, no puedes alzar la voz al igual que tu  mirada queda fija en el suelo, arrepentida, frustada, y en tu mente cada vez son más los sentimientos de culpabilidad.

No puedes perdonarte seguir haciendo daño a los que tanto quieres, lo demás es igual, pero ver la cara de desesperación de tu hermana o de tus padres es algo demasiado doloroso, algo que supera cualquier mal físico...

Perdida entre tus pensamientos, envuelta de temor, ahogada en la verguenza, sucumbida en la desesperación tus actos poco a poco siguen sucediéndose y ya no sabes donde agarrarte para cambiar y dejar de lado esa parte que tanto daño te hace y hace a los que más quieres...

¡Qué doloroso es verte hundida por mi y por no saber como ayudarme!

¡Qué doloroso es no saber como agradecerte todo lo que haces por mi y ayudarte a comprender que esta lucha no puede ser tuya, que tan solo es mía pero que siempre estoy lejos de la victoria!

...te quiero aunque a menudo puedas dudarlo al fracasarte/me de nuevo...

jueves, 26 de abril de 2012

Miedo

Sin rutina, sin nada que hacer, nada por lo que luchar y lo peor es que tampoco tienes ganas de cambiarlo.
Temes el día a día, ver a los demás, salir de casa. Cruzar el umbral de protección te ahoga, impide que mantengas un ritmo adecuado en la respiración. El miedo se apodera de tu cuerpo cuando éste avanza entre cualquiera de esas calles que no te aportan seguridad.
Antes solo había una zona prohubida, inaccesible, a la que se te hacía imposible llegar, ahora sin embargo la inmensidad del exterior te anula por completo sin importar la zona. Cada vez que das un paso sientes como tus piernas tiemblan, cada vez que alguien se acerca a tu ser tu mente se bloquea, paso a paso aceleras el ritmo de tu caminar convirtiéndolo en un adagio que el mejor pianista consideraría imposible de tocar. No es tu mente quien impulsa tus movimientos, tan solo es tu peor enemigo quien los domina, es el miedo quien no te abandona.
Las horas en casa acaban con tu paciencia, ver siempre las mismas paredes te ayuda aún más a perder el ánimo. Metida en un bucle sin fuerzas donde no puedes hallar salida.
Permaneces perdida, sin saber qué hacer. Nada calma tu mente, nada te da fuerzas para mejorar, nada ni nadie te roba una sonrisa, todo acaba siempre resumido cuando empiezas a llorar. Hubo un instante en que soñaste con un mañana, luchaste por un mejor futuro, pero a pasos agigantados todo desapareció formando parte tan solo del pasado. Ahora no eres capaz de mirar hacia adelante ya que vives angustiada en un presente que tan solo consigue desconcertarte.
Tratas de hacer que las manecillas del reloj se muevan rápidamente sincronizadas con las palabras que permanecen ocultas en cada libro que te acompaña, pero sabes que esa compañía no logra llenarte sino que hace aumentar el vacío infinito de tu interior.